La opinión de La Nación
La opinión de La Nación
Recuperar lo robado: cuando ya
no quedan más excusas (*)
La decisión del presidente Macri de recurrir a un decreto de
necesidad y urgencia (DNU) para recuperar los bienes robados al
Estado por la corrupción va
mucho más allá de lo meramente formal. Con esa frase comenzábamos nuestra
columna editorial de hace poco más de un mes. El transcurso del tiempo ha
confirmado lo que presumíamos: a la hora de rechazar el DNU todo el peronismo
marchó unido en la
Comisión Bicameral de Trámite Legislativo del Congreso Nacional .
Si, como muchos interpretaban en
aquel momento, el objetivo político del DNU iba camino de forzar una reacción
legislativa y, con ella, dejar expuesto dónde se para la oposición respecto de
este tema tan sensible, la respuesta es clara: se para en la vereda de los que,
con su accionar, siguen facilitando la impunidad de quienes hicieron fortunas
personales usando el dinero del Estado.
Esta consideración corre por
cuerda separada de los defectos que pudiera contener el citado DNU. Entre las
principales críticas que se le han realizado figura el hecho de haber sido
firmado mientras el Congreso se encontraba en funciones y que no corresponde
usar ese instrumento presidencial cuando se trata de cuestiones que rigen en
materia penal.
El
tema pasa entonces por determinar cuál ha sido el comportamiento del Congreso
mientras ha estado en funciones. La discusión sobre la extinción de dominio se
viene demorando desde hace tres años y solo empezó a darse en el ámbito
parlamentario cuando una escandalosa evidencia no dejó más resquicio a los
legisladores frente a los ojos de la sociedad: la descarada imagen de José López , ex
mano derecha de De Vido ,
ocultando bolsos con dólares, euros y joyas en un seudoconvento, acompañado por
la entrega de armas a un grupo de monjas que las recibían sin inmutarse.
Otro
hecho de corrupción sin precedente, revelado por los cuadernos de las coimas en
agosto pasado, volvió a activar la discusión parlamentaria,
pero sin que en ninguno de esos dos momentos se llegara a la sanción de la
correspondiente ley, una herramienta vital para hacer justicia no solo respecto
de los responsables del saqueo a las arcas públicas, sino para que el recupero
del dinero y los bienes de esas exacciones vuelvan al Estado, es decir, a todos
los ciudadanos.
En esos tres años, el Congreso fue
y volvió sobre los proyectos en danza. Primero, Diputados aprobó su iniciativa
en 2016. Recién dos años después, el Senado se avino a tratarla, modificándola
sustancialmente, por lo que ahora debe regresar en última revisión a la Cámara baja. Si los
diputados quisieran mantener su texto original, necesitarán de una mayoría
simple. Si no la consiguen, quedarán en pie los cambios del Senado, entre
ellos, que la acción de extinción de dominio recién podrá iniciarse una vez que
el juez decida la elevación a juicio oral de la causa penal. Diputados
habilitaba el proceso con la simple imputación ante la Justicia , ubicando la
acción en el fuero civil, sin tener que esperar los aproximadamente 14 años que
suelen demorarse los juicios por corrupción.
Otra diferencia: Diputados
estableció que esa figura se aplique a causas que ya estén en curso o ante
hechos ocurridos con anterioridad a la entrada en vigor de la ley. En el
Senado, rechazaron la retroactividad.
Mañana, el presidente Macri dejará
inaugurado en el Congreso un nuevo período de sesiones ordinarias. Es de
esperar que la recuperación de lo robado al Estado por la corrupción sea, si no
el primero, uno de los primeros temas por debatirse, junto con el
financiamiento de las campañas políticas.
Cuando
el país está a las puertas de un año electoral, leyes como las citadas adquieren una importancia todavía más
relevante.
Los legisladores tienen nuevamente
la oportunidad de sancionarlas. De no poner más excusas que traben el proceso y
terminen siendo garantía de impunidad. Como ya hemos dicho desde estas
columnas, es de esperar que hagan su tarea en el sentido de justicia que
reclama la sociedad en su conjunto.
(*) Editorial del 28/2/019.
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