Una causa repleta de pústulas
Una causa repleta de pústulas
El
juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, avanza en la causa en la que
investiga la supuesta extorsión que Marcelo D’Alessio realizó contra el
productor agropecuario Pedro Etchebest en el marco de la causa de los
“cuadernos de las coimas”. Ayer, el magistrado tomó declaración
indagatoria a Ricardo Oscar Bogoliuk, personal retirado de la Policía de la Provincia de Buenos
Aires y sindicado como exagente de la
AFI , que actualmente lleva adelante actividades de
consultoría de seguridad. Fue detenido el pasado lunes 25 de febrero junto
al excomisario Aníbal Degastaldi. Bogoliuk negó los hechos que se le imputaron
y tampoco quiso responder a las preguntas del magistrado. Por su parte, la AFI afirmó que no tiene
vínculos con el excomisario. En su resolución, Ramos Padilla le atribuye
a Bogoliuk “haber tomado parte de una estructura delictiva dedicada a la
realización de operaciones de inteligencia e investigación sobre determinadas
personas a los fines de su coacción, intimidación y extorsión, para obtener -en
forma indebida- réditos económicos y otra clase de prestaciones o beneficios
indebidos, como la obtención de declaraciones no voluntarias en causas
judiciales y en programas periodísticos de un testigo, denunciante, arrepentido
o entrevistado y el armado de causas en perjuicio de abogados u otras personas
que podían afectar o turbar los planes buscados por la organización”.
El
magistrado consideró que las maniobras ilícitas de Bogoliuk y D’Alessio no se
basaron solo en el espionaje a Etchebest y el exdirectivo de PDVSA Marcelo
Brusa Dovat “sino que también abarcaron otras áreas, como por ejemplo los
informes de inteligencia que realizó sobre los periodistas del programa
televisivo “Animales Sueltos” (conducido por Alejandro Fantino y cuyos
columnistas son: Edi Zunino, Javier Calvo, Maxi Montenegro, Fernando Carnota y
Romina Manguel), cuya fuente de información fue el periodista Daniel
Santoro (también columnista del ciclo) a quien D´Alessio señala -en sus
reportes de inteligencia- como su “amigo” y que también le era reportada al
-entonces- agente de la
AFI Bogoliuk ”. Daniel Santoro es uno de los integrantes
de los medios de comunicación mencionados por D'Alessio, según la
resolución del juez de Dolores. Días atrás, en diálogo con PERFIL, el
periodista de Clarín justificó su relación con el denunciado, a la que definió
como "una fuente", y aseguró que fue
"engañado". "Yo hice mi trabajo periodístico", afirmó
a este medio el columnista de Animales Sueltos. Esta información en torno al
reporte que D´Alessio hacía a Ricardo Bogoliuk, da cuenta también de la
permanencia de la organización delictiva y de los diferentes planes ilícitos
que se desarrollaban. Se le imputa también su participación en los hechos que
perjudicaron a Marcelo Brusa Dovat a quien la organización investigó y -a
través de maniobras de espionaje- encontró y 'ablandó' para que brinde una
declaración no voluntaria ante periodistas -tales como Daniel Santoro y el
Fiscal Stornelli, entre otros.
Su
participación surge, entre otras pruebas, no solo del intercambio de chats
donde se habla del caso, sino también del modo en que D´Alessio le reporta
sobre el avance de esas operaciones a Bogoliuk, a la par que lo hacía con el
periodista Daniel Santoro y el Fiscal Carlos Stornelli”, remarcó Ramos Padilla.
Entre las actividades que desarrolló esa organización y en las que él
participó, el magistrado aseveró que “se encuentra la exigencia ilegítima de
dinero -por parte de otro integrante de la organización: Marcelo Sebastián
D’Alessio- a Pedro Etchebest de trescientos mil dólares estadounidenses
(U$300.000) para no ser involucrado en una causa que tramitaba el Dr. Carlos
Stornelli”. “En este caso, además de los testimonios del propio
Marcelo D´Alessio que refirió haber llevado adelante estas maniobras junto
con Degastaldi y Bogoliuk, se encuentran los mensajes de whatsaap referidos a
esta operación y de otras operaciones de espionaje que mantuvieron D´Alessio y
Bogoliuk”, argumentó el juez. Para el magistrado, la colaboración de
Bogoliuk y D’Alessio era estrecha dado que “conversaban, planificaban y/o acordaban
el modo en que estas operaciones de espionaje y extorsión se llevarían adelante
y que -luego- concretaban”. Como respuesta a la acusación del juez,
Bogoliuk manifestó: “Niego los hechos que se me imputan tal cual como fueron
descriptos y de acuerdo a la complejidad y por consejo de mi abogado no voy a
responder preguntas”. Por otro lado, la
AFI desconoce al comisario Bogoliuk, no obstante, acepta que
estuvo "contratado para actividades específicas secretas" entre el 4
de mayo y el 31 de diciembre de 2017. Para dar cuenta del vínculo laboral, le
remitieron al juez el contrato y aclararon que si necesita mayor información
sobre sus tareas específicas debe solicitar el "levantamiento del
secreto". La AFI
denunció a D’Alessio el 14 de febrero y no descarta que Bogoliuk haya
conservado alguna credencial de la dependencia y la haya utilizado sin estar ya
bajo su órbita. Por último y en diálogo con PERFIL, la Agencia Federal de
Investigaciones negó "investigar periodistas". Tras la
publicación del nuevo escrito de Padilla, Santoro no atendió a los
llamados de este medio.
(*) Perfil, 28/2/019.
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