Cartas de lectores publicadas en La Capital de Rosario

 


Son el futuro

7/7/011

 

Uno de los legados más importantes del ex presidente Kirchner fue el haber convencido a los jóvenes de que la política, lejos de ser una mala palabra, es una noble actividad que dignifica al hombre. Les hizo ver que la política no está reñida con la moral y el idealismo. Y los jóvenes se entusiasmaron y comenzaron a actuar en política, movilizados por ideales de justicia social, libertad y fraternidad. Las exequias del ex presidente Kirchner fueron el bautismo de esa juventud militante, movilizada y entusiasta. La derecha no tardó en reaccionar. Elisa Carrió profirió un insulto incalificable-“fuerza bruta”-para denostarla y desde los medios concentrados comenzó una campaña sistemática de desprestigio A partir de entonces todos los dardos fueron dirigidos contra La Cámpora, convertida en una bestia antediluviana por el orden conservador. Lejos de ser idealistas, vociferan las plumas del establishment que los jóvenes que militan en el kirchnerismo son matones a sueldo, violentos e intolerantes, aves de rapiña que lo único que les interesa es el poder y el dinero. Parece mentira que en pleno siglo XXI la militancia juvenil progresista sea denigrada de manera tan vil y grosera. Lamentablemente ser joven y, peor aún, ser progresista e idealista, no es perdonado por los nostálgicos de la década del noventa, donde los jóvenes sólo se preocupaban en consumir y divertirse. Ahora es diferente. Ahora los jóvenes se interesan por la política, no aceptan ese conformismo que paraliza el corazón y obnubila la mente. Ahora los jóvenes critican las mentiras vitales, desafían las “verdades” impuestas por los que mandan. Ahora no es tan sencillo controlarlos. Su presencia mortifica a quienes presagian el fin del kirchnerismo. Ellos son la garantía de continuidad del socialismo democrático y progresista instaurado en mayo de 2003. Son sus custodios. Son el futuro.

 

 

 

El triunfo de Macri

14/7/011

 

El orden conservador diagramó la reforma política de 1910 para permitir a ciertos sectores medios, hasta entonces exceptuados de la política, participar en los procesos electorales. Grande fue su sorpresa cuando en 1916 ganó el candidato no previsto, Hipólito Yrigoyen. A partir de entonces la derecha comenzó a recorrer un largo calvario en la búsqueda del candidato que le permitiera acceder al poder por el voto popular. El general Agustín P. justo, emblema del orden conservador, fue presidente gracias al fraude patriótico. Su ilegitimidad de origen permitió la llegada al poder de Perón. Su derrocamiento en 1955 fue la consecuencia de la impotencia de la derecha para frenar al peronismo dentro de la constitución. La candidatura del general Pedro Eugenio Aramburu en representación de Udelpa a comienzos de los 60 fue otro intento del orden conservador para intentar colocar en la Casa Rosada a uno de sus cuadros por la vía democrática. Fracasó. En los 80 el capitán ingeniero Alvaro Alsogaray creó la Ucede para tratar de ser presidente en 1989. También fracasó. Su lugar fue ocupado por Carlos Menem. Durante diez años y medio gobernó para el orden conservador. Sin embargo, el riojano no era un cuadro de la derecha. No era un Justo, un Aramburu o un Alsogaray. Hasta que apareció el ingeniero Mauricio Macri para ganar las elecciones porteñas en 2007. Por primera vez un genuino exponente del orden conservador logró imponerse en comicios limpios y transparentes. Luego de cuatro duros años de gestión, logró revalidar sus títulos con una nueva y contundente victoria sobre Daniel Filmus, su mismo rival cuatro años antes. Su discurso posterior al triunfo significó el comienzo de su carrera por la presidencia en 2015, la clara manifestación de su intento por hacer posible lo que hasta ahora ha sido imposible para la derecha: que un cuadro suyo sea plebiscitado democráticamente en comicios de una legalidad y legitimidad incuestionables. Del éxito de Cristina en su próxima gestión dependerá que el sueño del orden conservador no se haga realidad.

 

 

 

Cachetazo a la soberbia (*)

29/7/011

 

En una carta del día 14 de julio pasado, un lector de apellido Kruse hace una perorata histórica de cómo la derecha no funciona y no logra conquistar la popularidad para llegar al poder. Me gustaría saber qué opina ahora después de ver los resultados de las recientes elecciones, con la aplastante y vergonzosa paliza que sufriera el espadachín de la presidente de la nación, ya que un humorista como Del Sel, con ideales de derecha, por un pelo no consiguió ser gobernador. Usted conoce mucho de historia, pero se olvida de la realidad, y hoy por hoy, la izquierda fracasó en sus máximos exponentes, llámese Rusia o Cuba, por no poder dar soluciones a su pueblo, a tal punto que Fidel Castro dijo que después de 50 años tuvo que reconocer su fracaso, y está tratando de ver cómo arregla el estropicio de cientos de muertos en el camino de la construcción del socialismo. No es bueno cultivar la política de las dádivas, del no esfuerzo, repartiendo plata de los jubilados por el solo hecho de tener hijos, entre otras cosas. Hay que concientizar a las masas, que as cosas se consiguen con esfuerzo y trabajo, y que si no se genera riqueza, sólo se puede repartir promesas y fantasías. Hoy ganó la democracia, la calma, la discusión de las ideas, el diálogo para la solución de los problemas, no la confrontación y el choque divisionista. Aquel señor que en ejercicio de la presidencia le fijo al campo “los quiero ver de rodillas”, debería ser “explícitamente” desautorizado en su nombre y pedir perdón por semejante exabrupto de un presidente de una nación cuya principal riqueza es el campo para producir alimentos para un mundo ávido de comida. Sería bueno que desde arriba se leyera bien el resultado de las elecciones porque me parece que Aníbal Fernández, a raíz de sus declaraciones, no entendió nada.

 

(*) Respuesta del señor Enzo Maineri a mi carta del 14/7/011.

 

 

 

Si no es cristinista es oligarca (*)

 

Esta carta está dirigida al señor Kruse. Estimado, veo que para usted el que no es cristinista es oligarca. Yo tengo 79 años y no soy creyente de la antes mencionada, pero no soy oligarca, soy jubilado y le voy a enseñar. El capital de la Ansés está constituido por el aporte, durante 48 años, del personal en actividad y la patronal para su posterior jubilación. Se crearon las AFJP pero como molestaban a los intereses de los mandatarios las eliminaron, no sé a dónde fueron los capitales, a lo mejor al sur. Si la Ansés cumpliera sus funciones no habría peligro de que se quedara acéfala si diera el 82%, pero en la actualidad se ocupan de lo siguiente: comprar títulos y poner personas de su amistad en el directorio, prestarle a la General Motors, a las personas que llegan a la edad de jubilarse, sin haber hecho aportes se las jubila sin tener en cuenta su situación económica, s eles da a las madres solteras (hasta 5 de 18 años) 220 pesos por cada uno o sea que perciben más que el mínimo que el que aportó 48 años, pero previamente estas madres deben sacar el DNI, cuyas tapas en lugar de ser verdes son celestes (¿no le llama la atención?). A los mayores de 70 años que no tengan obra social, sin tener en cuenta su situación económica se pueden atender por Pami sin cargo (a mí me descuentan 73 pesos mensuales) además con capitales de la Ansés se cubren los déficits fiscales, se manda en un avión a un cumpleaños al sur a la hija de los mandatarios, y al igual que usted todo lo que hacían los otros eran oligarcas y estos son defraudadores. Ahora me voy a ocupar de algo muy triste, el jefe de Gabinete en una desgraciada declaración lamentó el fallecimiento del bebé que sufrió la salidera bancaria pero aprovechó para meter cizaña diciendo que los politiqueros esperaban ese desenlace para hacer política. A mí me parece que un descentrado puede decir eso, antes de pensarlo por qué no reconoce a su hija extramatrimonial y demuestra que en lugar de un cacho de bofe tiene corazón y en lugar de estopa tiene cerebro. ¡Qué raro que no le echó la culpa a Magnetto y a Clarín! Por otra parte es tan cretino que dice que este país tiene la tasa de delincuencia más baja, pero desde que está este gobierno hay más de 30000 desaparecidos, todos los días hay más de 11 desaparecidos y no por causas políticas.

 

(*) Carta de Julio Podlubne publicada el 29/8/011.

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